La cercanía de la localidad con el Dique del mismo nombre, hacen de la zona una villa turística que conquista a numerosos viajeros que buscan disfrutar de vacaciones únicas y de un merecido descanso en medio de preciados paisajes.
Las aguas del embalse Cruz de Piedra, cuya extensión consta de 1.200.000 m3, significan un espacio de encuentro para los amantes de los deportes náuticos y las prácticas pesqueras. Hacia el este de la capital de la provincia, este manantial hace posible la captura de carpas, percas y truchas.
La pesca deportiva en estos lugares es otra de las opciones mediante la cual recrearse junto a los amigos o la familia. En el predio también puede encontrar un Club Náutico que contribuye con sus servicios e instalaciones a hacer efectiva la realización de esta actividad tradicional.